Apuestas Simples: Es la apuesta más sencilla. Tan solo hay que realizar un pronóstico a un evento y si se cumple se recibe el premio, que será el resultado de multiplicar el importe que hayas invertido en la apuesta por la cuota asignada a dicho acontecimiento.
Apuestas Combinadas: Consiste en realizar dos o más pronósticos en diferentes eventos deportivos. Para que la apuesta sea considerada ganadora, se debe acertar los diferentes pronósticos que componen dicha apuesta. Si se falla alguno de estos pronósticos, se pierde la apuesta.